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jueves, 30 de diciembre de 2010

LAMINITIS EN BOVINOS


Los problemas podales en bovinos lecheros son una causa importante de perdidas económicas en la producción lechera. Suponen una merma en la capacidad productiva de las vacas, en el mantenimiento de la condición corporal y la fertilidad llevan al envejecimiento precoz e incluso al sacrificio de animales.

LAMINITIS (CORIOSIS), PATOGENESIS
La laminitis es una inflamación aséptica del tejido laminar sensitivo (corium) de la pezuña. Debido a que solo la porción laminar del corium está involucrada, coriosis es el término más adecuado considerado por algunos autores. Sin embargo, para la mayoría, laminitis es el término más utilizado. 
La patogénesis de la laminitis se cree que esta asociada con una alteración en la microcirculación sanguínea a nivel del corium, lo que determina una disrupción y por ende una desunión entre la dermis-epidermis y el hueso podal (tercera falange). La acidosis ruminal láctica se considera como la mayor causa que predispone a la laminitis y probablemente su efecto destructivo a través de varias sustancias vasoactivas liberadas durante el proceso de acidosis ruminal. Estas sustancias vasoactivas inician una cascada de eventos en la vasculatura del corium, incluyendo un incremento del flujo sanguíneo, trombosis, isquemia, hipoxia, y un bloqueo y desvío arterio venoso, el cual dirige la sangre directamente desde la arteria a la vena. Todos estos eventos resultan en edema, hemorragia y necrosis de los tejidos del corion.
El corium es particularmente vulnerable a cualquier efecto inflamatorio. Cualquier aumento de tamaño del corion debido a la acumulación de fluidos (sangre y linfa) incrementará la presión, el dolor y daño tisular. Debido a la unión entre la pared y el hueso podal, la inflamación del corion a menudo afecta e inflama la banda coronaria.
La destrucción de las uniones dermales-epidermales permite la separación de los tejidos laminares. Cuando esto ocurre , el hueso podal se suelta y se hunde. El resultado es la compresión del corion entre el hueso y la suela, estableciéndose las condiciones para el desarrollo de una úlcera plantar. En algunos casos este fenómeno involucra una severa rotación ventral de la punta de la tercera falange hacia la suela. Si esta compresión es muy severa, una úlcera en la suela de la punta de la pezuña se puede desarrollar. Parece que el proceso de rotación de la tercera falange (típico en los caballos) es más frecuente en laminits agudas. Por otro lado, si lo que ocurre es un hundimiento general de la tercera falange, entre la unión típica de los talones y la suela, una úlcera plantar o de los talones se desarrollará en el área conocida como sitio típico de las úlceras que coincide con la proyección de la tuberosidad flexora de P3.


LAMINITIS AGUDA 
La forma aguda de la laminitis ocurre en forma esporádica, sin embargo la incidencia es mayor en animales de primera lactancia durante los primeros 60 a 90 días de producción. Los signos clínicos incluyen rigidez de los miembros, dolor y extremo rechazo de caminar. Algunos animales permanecen parados con sus miembros anteriores hacia adelante, mientras que otros pueden permanecer parados con su columna arqueada, tratando de juntar sus 4 patas, para descomprimir y evitar el dolor. En la mayoría de los casos los animales están echados. El dolor se torna severo cuando se fuerza a parar a un animal afectado. Enrojecimiento, inflamación y una mayor sensibilidad del rodete o banda coronaria y el área sobre los bulbos del talón son algunas manifestaciones típicas de esta condición. Al contactar las paredes de la pezuña y la banda coronaria, se sentirá más caliente de lo normal, signo típico de los procesos inflamatorios agudos. 

Algunas de las causas relacionadas a esta condición son factores genéticos, ambientales, nutricionales y de manejo alimentario. También se han reportado algunas asociaciones entre laminitis y enfermedades tóxicas tales como mastitis, y metritis o desordenes metabólicos tales como cetosis y acidosis ruminal (láctica). La lesión en la pezuña involucra una alteración en la micro-circulación sanguínea de los tejidos más inervados del tejido laminar sensitivo . Aunque es localizada, la inflamación es severa y causa una extremada incomodidad durante los estados agudos.

La terapia está dirigida a tratar el dolor. Desafortunadamente no hay muchas opciones en el ganado bovino, salvo el uso antinflamatorios no esteroideos , el movimiento de los animales a las praderas, corrales anexos, cubículos con camas adecuadas u otras áreas fuera del concreto o superficies duras. El animal debería ser únicamente alimentado con heno aumentando de forma gradual el nuevo consumo de concentrado.

LAMINITIS CRONICA
Los signos clínicos de la laminitis crónica son moderados con la excepción de cambios en la queratina de las paredes de las pezuñas que llegan a ser notorias a través del tiempo. En la laminitis crónica, las pezuñas se ensanchan, aplanan y desarrollan las típicas ranuras horizontales. Las lesiones del tejido laminar sensitivo son las mismas descritas para la forma aguda de la laminitis, sin embargo, ocurren en forma más gradual resultando en signos menos obvios de incomodidad.
La causa de la laminitis crónica está primariamente asociada a la alimentación y las dietas ricas en granos. No hay un tratamiento específico , salvo el realizar un recorte de pezuñas en forma más frecuente.
Dr. Juan Ramos Rama

jueves, 16 de diciembre de 2010

COJERAS v/s PRODUCCIÓN

La pérdida de leche varia entre un 1.5 a 2.8 kg/dia durante las dos primeras semanas luego del diagnóstico.

Impacto productivo depende de:
  • Severidad de la lesión
  • Duración de la cojera
  • Fase de lactación
  • Precocidad de tratamiento
  • Eficiencia del tratamiento
El tratamiento precoz NO debe ser más de 48 hrs después del diagnostico, esto es clave para trabajar en patas.
Las cojeras en predios lecheros hacen perder la lactancia, lo ideal es trabajar y familiarizarse con la MEDICINA PREVENTIVA, ya que cuando la vaca se puso coja la leche ya se perdió.

Un factor muy importante en el predio, es el manejo que tiene el personal con nuestros animales, si no existe una buena relación de vaca/persona estás se agotan, se frustran y se enojan, provocando malas prácticas, causando estrés y baja de la producción de leche. Y con gente enojada no se puede trabajar.


"Consecuencias de la interacción de factores de riesgo que cuando alcanzan un punto crítico desencadenan la enfermedad"
Dr. Juan Ramos Rama